Ser policía: El otro lado de la seguridad

Por: Ro Abad   @Ro_Abad1

 En las marchas (sobre todo en las del movimiento feminista) siempre hay un aparente enemigo: la policía. En nuestro país no se puede confiar en este cuerpo porque de manera generalizada (y si hay casos conocidos donde no es así) son actores que asaltan, golpean y sobre todo están inmersos en el tema de la corrupción en semáforos, trámites, detenciones y cualquier otro ámbito donde estén se involucren.

Según un estudio realizado por la UVM, al mencionar la palabra “policía”, 35% de los entrevistados la asocia con corrupción, 13% con inseguridad y 19% con otras características negativas como miedo, ineficiencia, desconfianza y prepotencia. Los propios policías reconocen que los ciudadanos los miran con desconfianza y perciben un alto nivel de corrupción e impunidad al interior de las instituciones.

 

 

Pero ¿Qué hay del otro lado? Del lado de él o la policía. No se trata de defenderles, en mi personal punto de vista y experiencia siempre critico su actuación y tampoco confío en ellos o ellas.

 

 

 

 

¿Cómo es ser policía? ¿Qué requisitos debes de cumplir?

  • Ser ciudadanos mexicanos (si tienes doble nacionalidad deberás informarlo y mostrar tu certificado de nacionalidad mexicana por nacimiento, expedido por la Secretaría de Relaciones Exteriores)
  • Tener mínimo la secundaria terminada
  • Entre 18 y 35 años de edad para nuevo ingreso.
  • Una estatura mínima en hombres de 1.60 y en mujeres 1.5 mts 
  • Tener buena conducta, es decir, que aquellos que fueron condenados por un delito doloso o están sujetos a un proceso penal o tienen dos o más ingresos a las comunidades para adolescentes, no podrán participar en las convocatorias.
  • Se pide que cuenten con buen estado de salud física y mental, y no usar sustancias psicotrópicas o padecer alcoholismo.
  • Por último, se solicita no tener antecedentes de destitución en el Registro Nacional de Personal de Seguridad Público y presentar y aprobar las evaluaciones del Centro de Control de Confianza y los procesos de la Universidad de Policía.

 

¿Ya no parece tan sencillo verdad? Tiene que ser una decisión razonada el querer entrar al cuerpo policiaco y por supuesto dependerá a que división y en qué área.

 

Desde el equipo de Polifacetik pudimos investigar de manera directa y anónima con varios integrantes de estas corporaciones, que la vida diaria dentro de la corporación no es nada fácil. Aquí algunos datos extra oficiales:

  • Solo les dan un juego de uniforme y zapatos. Por lo que sí la persona trabaja toda la semana tendrá que comprar por lo menos un juego más para poderlos lavar. 
  • Cuando les proporcionan armas, tienen un número limitado de balas por lo que si las gastan ellos deben de comprar el excedente.
  • Los salarios son muy bajos y las prestaciones son mínimas. Ganan en promedio entre 7 y 11 mil pesos mensuales.
  • Falta de capacitación real y efectiva. Existen cursos que hay que cumplir por cumplir, en su opinión sin mucho sentido como el de derechos humanos (si, así como lo leen, no le ven la aplicación específica)
  • Disparidad en las jornadas laborales. Los turnos no son siempre los mismos y hay que tener disponibilidad por cualquier evento o llamado especial. 
  • Están expuestos a constantes riesgos sin muchas herramientas. Un gran porcentaje tiene que pagar por sus chalecos antibalas y la gasolina de las patrullas. 
  • No hay reconocimiento y no hay un crecimiento. El 65% de los policías jamás ha recibido un estímulo por su trabajo y peor aún se les extorsiona al interior solicitándoles una cuota para tener una patrulla, no castigarles, no cambiarles de adscripción, o reducir sus horarios laborales.

 

 

Ahora imagínate ser mujer policía. La situación es aún más grave. Primero se trata de una profesión que fue diseñada principalmente por hombres y para hombres.

De acuerdo con otro estudio por Causa en Común (Ser Mujer Policía) en general, las mujeres deciden ingresar a la policía principalmente por vocación, al igual que los hombres. Su segunda motivación es la necesidad económica, al igual que los hombres. Sin embargo, esa vocación por la labor policial suele disminuir en las academias, debido a la violencia ejercida en su contra: 7 de cada 10 mujeres policías sufrieron conductas indebidas, reciben mensajes, fotos o comentarios con insinuaciones, todo tipo de acercamientos, intentos de invitaciones a sostener relaciones sexuales y amenazas por negarse a tenerlas.

Esto además de que son pocas las mujeres al mando con las condiciones tan precarias más las de género hay mucha deserción.

No se trata de defender, como hemos mencionado a las mujeres policía ni a los hombres en las marchas. Ningún tipo de violencia es justificado. Pero habría que reflexionar sobre la presión a la que están sometidos, las órdenes que no tienen opción de no cumplir y la necesidad económica que las y los lleva a actuar a veces de manera impulsiva.

 

 

Referencias

 

https://opinionpublica.uvm.mx/estudios/ser-policia-en-mexico-que-rol-asume-la-sociedad.

Encuesta ¿Qué piensa la Policía? (2019), realizada por Causa en Común

https://www.animalpolitico.com/el-blog-de-causa-en-comun/ser-policia-en-mexico/

https://politica.expansion.mx/mexico/2020/11/24/el-riesgo-de-ser-policia-en-mexico-en-2020-uno-ha-sido-asesinado-cada-dia

http://causaencomun.org.mx

 

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